El comedor Económico de San Cristóbal constituye un real y efectivo espaldarazo para muchas personas de escasos recursos que logran cada día mitigar su hambre recibiendo a un precio asequible un alimento con altos estándares de calidad
Hombres y mujeres se esmeran todos los días de la semana para que la comida esté en el tiempo establecido, en el que las personas acuden día a día a comer, muchos con toda su familia
María Altagracia Guillen, la joven administradora del Comedor Económico, narra algunas experiencias vividas en su centro de trabajo con personas que se presentan al lugar y le hablan sobre sus precariedades
«No tengo forma de poder cocinar en mi casa y quiero, si usted me lo permite, comer ay aquí y llevar las comidas de mi mujer y los hijos ya que todos no podemos venir por la distancia» expresa la dama.
Guillen señala casi con lagrimas en los ojos que su mayor satisfacción cada dia,es saber que ayudó a mitigar el hambre a personas que si pueden comer el el lugar, no podrán hacerlo ese día
Hombres y mujeres empiezan afanosamente a colocar las comidas en platos para ser llevadas a algunos lugares e instituciones que le son despachadas raciones cocinadas como es el caso de la Policía Nacional, los policías municipales, el centro de retención de ilegales haitianos en Haina y otras instituciones
Indica la funcionaria que cuando haya actividades especiales los sábados y domingos en la que se debe llevar comidas, tambien el Comedor Económico labora en la preparación e los alientos
«Desde que el presidente ordenó que los Comedores Económicos no dejaran nunca de despachar las comidas, no ha pasado un solo día son que eso se haga para satisfacción de los que trabajos en cumplirlo» señaló