Los restos del globo
El funcionario de alto rango del Departamento de Defensa explicó que la decisión de esperar unos días para derribarlo en el mar, además de ser necesaria para proteger a los ciudadanos que habitan la zona, «fue beneficiosa» para conocer más datos sobre el aparato y sus objetivos.
Múltiples buques de la Marina y la Guardia Costera de EE.UU. se encuentran en el área donde se ha hundido el aparato. El perímetro está asegurado y realizan tareas de búsqueda para tratar de recuperar todo lo posible.
La policía del Condado de Horry (Carolina del Sur) advirtió a los ciudadanos de que pueden aparecer fragmentos en la playa.
Si los encuentran, los ciudadanos deben alertar a las autoridades y nunca tocarlos ya que son «parte de una investigación federal». «Los escombros no deben ser tocados, movidos o levantados» apuntaron a través de redes sociales.
La presencia de ese «globo espía» chino en el espacio aéreo estadounidense ha desencadenado una crisis diplomática entre Washington y Pekín y ha motivado la suspensión del viaje que el secretario de Estado, Antony Blinken, tenía previsto hacer a China.